Bora Bora Playa (Bora Bora beach)
El atolón de Bora Bora, ubicado en la parte sur del Océano Pacífico y parte del grupo de Islas de la Sociedad de la Polinesia Francesa, a menudo es aclamado como un paraíso terrenal. Este título está bien ganado gracias a sus esplendores naturales. Imagínese aguas cristalinas, playas de arena blanca y una temperatura del aire constante de alrededor de +27°C durante todo el año. Imagínese las extensas palmeras que bordean la costa y un suave sol que calienta tanto el cuerpo como el alma. Todos estos elementos se fusionan para encarnar nuestra visión por excelencia del paraíso.
Fotos
Descripción de la playa
Tras una inspección más cercana, resulta evidente que no todas las playas de Bora Bora se alinean con nuestra imagen de perfección por excelencia. Bora Bora es una isla volcánica, nacida del cráter de un volcán extinto. Enclavada dentro de la isla hay una laguna cuyas aguas son deliciosamente cálidas. A pesar de su naturaleza cerrada, la laguna goza de un notable grado de claridad. Los arrecifes de coral, que actúan como filtros naturales, rodean la isla y contribuyen al impecable estado de la laguna. El fondo de la laguna es diverso; en algunas zonas está compuesto por arena y fragmentos de coral, mientras que en otras se puede encontrar una mezcla de arena y guijarros.
Tomemos, por ejemplo, la playa Matira, la única playa pública de la isla, que se extiende a lo largo de su extremo sureste. Aquí, la arena es suave y fina como talco, contrastando con el coral roto que marca la entrada al mar. En Eden Beach, donde se encuentran hoteles de calibre más modesto, es posible encontrar algas en el agua. Por el contrario, en el Intercontinental Thalasso, donde reina la opulencia, la entrada del mar es arenosa, pero el área de playa común presenta arena que se siente densa bajo los pies. A pesar del atractivo inherente de todas las playas locales, cada una merece una consideración individual para determinar la elección más adecuada.
Si bien las playas de Bora Bora son oficialmente públicas, muchas áreas dentro de ellas, y a veces tramos enteros, son propiedad de hoteles.
Las playas son extensas, aunque su anchura rara vez supera los 20 metros. Entre las actividades más emocionantes en Bora Bora se encuentra el snorkel: explorar el reino submarino con un snorkel y una máscara. Como gesto hospitalario, cada bungalow pone a disposición de sus huéspedes este equipamiento. La vida marina de Bora Bora es realmente fascinante. Aquí, los lugareños han aclimatado las rayas a la presencia humana, volviéndolas casi domesticadas y sin miedo a la interacción. La experiencia de tales encuentros con estos serenos gigantes submarinos es nada menos que extraordinaria. Los visitantes aventureros también pueden alimentar a los tiburones de arrecife o a las barracudas, todo ello bajo la atenta mirada de profesionales experimentados, lo que garantiza una experiencia segura.
El buceo y el parasailing también se encuentran entre los pasatiempos favoritos de la isla. Los huéspedes pueden disfrutar de una variedad de embarcaciones, incluidos scooters, yates, barcos, catamaranes y kayaks. En particular, el kayak ofrece la oportunidad única de atravesar las aguas entre hoteles e incluso hasta islas cercanas.
El acceso a la isla central y sus satélites se facilita por diversos medios. Una carretera de circunvalación bordea las islas y conecta los hoteles. Barcos de transporte especiales desde el aeropuerto, situado en la isla más septentrional, proporcionan una ruta directa a estos destinos. Además, hay un servicio de ferry disponible para ir de isla en isla.
Momento óptimo para una visita
La mejor época para visitar la Polinesia Francesa para unas vacaciones en la playa suele ser durante la estación seca, que va de mayo a octubre. Durante estos meses, el clima se caracteriza por menos humedad, menores precipitaciones y temperaturas agradables, lo que lo hace ideal para actividades de playa y deportes acuáticos.
- De mayo a octubre: temporada seca : esta es la temporada alta para viajar con menos lluvia y más días soleados, perfecta para tomar el sol, bucear y disfrutar de las playas vírgenes.
- De junio a agosto: meses más fríos : estos meses ofrecen un clima más fresco, que sigue siendo lo suficientemente cálido para nadar pero más cómodo para explorar las islas.
- Septiembre a octubre: fin de la temporada alta : a medida que la temporada alta termina, estos meses pueden ofrecer un equilibrio de buen clima y menos turistas, lo que permite un ambiente más relajado.
Si bien la estación seca es generalmente la mejor época para unas vacaciones en la playa, también es la más concurrida. Para aquellos que buscan evitar las multitudes, considere los meses intermedios de abril y noviembre, cuando el clima aún es agradable y las islas están menos pobladas.
Vídeo: playa Bora Bora
Infraestructura
Todas las playas cuentan con tumbonas y sombrillas, lo que garantiza una experiencia cómoda y relajante. Los hoteles de la isla forman una red de bungalows ubicados por separado, cada uno de ellos sobre pilotes directamente sobre el agua, ofreciendo a los huéspedes una conexión única e íntima con el mar.
Para aquellos que buscan una aventura, una de las excursiones más exóticas consiste en caminar por el fondo del océano con un traje especializado. Este traje se asemeja a un acuario cuadrado transparente que se coloca sobre la cabeza y cuenta con un suministro de oxígeno. La experiencia no sólo es divertida sino también verdaderamente cautivadora.
La ciudad principal de Bora Bora, Vaitape, es un centro de actividad que cuenta con una gran variedad de tiendas, restaurantes, discotecas e instituciones oficiales. En Matira Beach, los visitantes encontrarán una pintoresca tienda donde podrán comprar refrescos y aperitivos. Lo más destacado del panorama gastronómico de la isla es "Bloody Mary's", un reconocido restaurante frecuentado por varias celebridades. Como testimonio de su popularidad, los nombres de estos distinguidos invitados están grabados en un tablero en la entrada, lo que despierta la curiosidad de muchos.